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MI HISTORIA
Cómo empezó todo...
Todo comenzó en una época muy lejana, en otro tiempo y otro lugar... El antiguo Egipto.
La familia Ishtar había sido reconocida por el faraón Aknamkanon como una de las más importantes y prestigiosas durante su reinado; de ella nacían grandes magos, eficientes escribas o sabios eruditos. Pero el mayor orgullo estaba por llegar, de manos de una pequeña niña que fue bautizada como Isis.
En la teoría, se dijo que la diosa había servido de inspiración para nombrarla, pero la realidad resultaba más fantástica aún; la Diosa Madre, en el momento del alumbramiento, bendijo a la pequeña y susurró su deseo a la madre; su nombre. La niña debía llamarse Isis.
Leyenda de color:
Historia canon.
Historia no-canon.
Su infancia...
Al principio aquel acontencimiento se guardó con mucho celo, pues pese a la insistencia de su madre acerca de lo que había ocurrido, resultaba cuanto menos difícil de creer que una deidad se manifestase a una simple mortal. Pero con el paso de los años Isis comenzó a manifestar ciertas... Anomalías. Extrañas visiones que la mantenían en una suerte de sueño o trance duante el tiempo que duraban, algunas le provocaban sonrisas, otras un llanto desconsolado. Tan extrema resultó la situación que durante unos meses, Isis no quiso salir de casa, ni pudo dormir con normalidad.
Finalmente, su padre decidió entregarla a los físicos para que la examinasen, temiéndose lo peor (entre enfermedades mentales y posesiones demoníacas). Fue allí donde descubrieron, de boca de la niña, que sus visiones eran nada más y nada menos que premoniciones. En ocasiones, cosas sencillas como la rotura de una vasija, en otras, la muerte de un conocido. El temor de creer que el futuro era inmutable le había provocado ese miedo cerval a las visiones. En el templo la ayudaron no solo a controlar sus visiones mediante la meditación y el control sobre su mente, sino también desalojaron de la misma la idea de que no podía cambiar el futuro; ese era precisamente su cometido de ahora en adelante.
Prever los futuros acontecimientos para poder actuar sobre ellos: evitar una guerra, prepararse para una tormenta, incluso seleccionar nuevos guerreros o magos para defender a su amado pueblo. Tan solo los dioses o fuerzas igual de poderosas podían enturbiar esas visiones, y en el peor de los casos... Incluso manipularlas. Para facilitar su labor como vidente, se le entregó el Collar Milenario, el cual potenció sus visiones y la ayudó a enocarse en un objetivo deseado.
Años más tarde, su familia concibió a un segundo hijo, cuyo nombre fue Marik. Lamentablemente, apenas tuvieron contacto durante su infancia a pesar de que Marik también fue enviado al palacio para servir como soldado. Su instrucción como sacerdotisa y entreamiento para perfeccionar sus dotes como vidente requerían demasiado tiempo, no fue hasta pasados varios años que volvieron a encontrarse, durante la ceremonia en la que nombraron a su hermano menor Consejero de la Corte, y se le concedió el privilegio de portar el Cetro Milenario.
Ese día notó algo extraño... Su collar adquirió un tacto frío, gélido. Por primera vez algo bloqueaba sus visiones y provocaba una reacción en el artefacto... La oscuridad se pronunciaba, y ese era su aviso.
La llegada de una nueva Reina...
Una noche, durante sus rezos en el templo, Ra la sacudió con una visión. La más nítida que había tenido hasta ahora: a las puertas de la ciudad, llegaban dos figuras maltradas en cuerpo y mente. Un joven y valiente guerrero que fallecía, entregando su vida para salvar a la de su protegida... Nada más verla, incluso en una visión, la sacerdotisa quedó impactada por el aura de pureza que desprendía, por lo exótico de su apariencia, y más que nada, por la fortaleza que desprendían sus ojos como el cielo.
Rápidamente acudió al faraón y le alertó de lo que había visto; el faraón y su guardias se dirigieron a la frontera de su ciudad para recibir al los desconocidos. Nada pudieron hacer por el guardián, pero la niña fue rescatada... Isis siempre estuvo con ella, crecieron juntas como hermanas, igual que el Faraón Atem y Marik, hasta el punto en que Isis se convirtió en la Arquitecta Real de mano de la reina, para construir una cámara secreta en la que la mujer pudiese reposar y limpiar su cuerpo tras las peligrosas tareas que los dioses le encomendaban.
El cataclismo del Traidor
Desde el nombramiento de su hermano, sintió que algo iba mal. Su collar reaccionaba a su presencia, y peor aún, algo bloqueaba sus visiones. Por mucho esfuerzo que le pusiese no lograba ver nada de Marik, más que una turbia y dolorosa oscuridad. Oró a los dioses en busca de respuestas, pero estaban callados... Como si hubiesen abandonado a su querido hermano. Eso era más temible que cualquier manifestación.
Un castigo, una palabra, una imagen, una simple corriente de brisa... Nada llegó. Ninguna respuesta. Los dioses callaban y la falta de información la devoraba por dentro... Y Marik marchó, lejos, durante meses nadie supo nada de él. Ni siquiera ella, que seguía cegada por una cortina de misterio y oscuridad; así siguió por mucho tiempo, hasta que quien fuera que bloquease sus visiones, decidió dejarle ver el futuro inminente en el momento preciso... Las plagas de Egipto. La desolación y la muerte, la sangre y el miedo, piras de cadáveres ardiendo, la muerte del Faraón y el ascenso de su hermano. La tiranía que Marik Ishtar impondría ya no sobre Egipto, sino sobre el mundo entero. Un mundo de sombras donde él era la ley... Donde un demonio era la ley.
Alertó al sacerdote Seto, compañero de profesión y pareja, al Faraón y a la reina. La catástrofe se evitó... Con un alto precio. La Reina Nederith sacrificó su alma para encerrar a Marik en el Reino de las Sombras, los dioses dictaron que debía eliminarse todo rastro del Consejero y la Reina por el bien de Egipto y sobre su familia cayó un terrible castigo. Tan solo ella podría recordar a su hermano consumido por el mal y su querida Nederith y llorar su pérdida en silencio.
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Las Memorias del Faraón (SPOILER)
Una mujer sabia, amable e inteligente, parece compartir una amistad cercana con Mahad en el anime, como se ve cuando ella conversa con él antes de que Mahad se marche para pelear con Bakura por el bien del Faraón. Es capaz de sentir su suerte durante el Duelo con Bakura, y pronuncia su nombre con lágrimas fluyendo por sus mejillas. Isis siente sólo el fallecimiento de Mahad, y grita su nombre llorando, mostrando que realmente se preocupaba por él. Incluso tres mil años después, en el Duelo final con Atem y Yugi, cuando "Mago Oscuro" hace su aparición, Ishizu anuncia "un profundo dolor en su corazón".
Durante la batalla final, ella muere mientras se enfrentaba a Zorc en un intento de hacer ganar suficiente tiempo a Mana para dar a Atem su Puzzle Milenario.
Ciudad Batallas (SPOILER)
La familia de Isis custodió la tumba del Faraón durante generaciones y dos de los Artículos del Milenio, el Cetro y el Collar, que serían pasados a Ishizu y su hermano Marik cuando alcanzasen la mayoría de edad. Marik, a quien se le prohibió salir de la tumba del Faraón, ya que podría desviar la atención de su deber, convenció a Isis para hacerle ver el mundo exterior.
Marik ya no quería convertirse en un Cuidador de Tumbas y cuando se vio obligado a tomar el ritual de iniciación para convertirse en un guardián, sin querer desató a Yami Marik (quién en realidad era el antiguo Consejero encerrado en el objeto), quien tomó el Cetro del Milenio para sí mismo y después asesinar a su padre
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Años más tarde, Ishizu intenta detener la búsqueda de Marik de liberar el poder del Faraón para sí mismo, tomando la carta del Dios Egipcio "Obelisco el Atormentador" antes que él.
Ishizu se convertiría en la secretaria general del Consejo Supremo de Antigüedades Egipcias y en la conservadora del Museo Domino con el fin de atraer a Yugi Muto, Seto Kaiba y Akiko Tanaka (reencarnación de la reina Nederith) para salvar a su hermano Marik Ishtar de su alter ego oscuro, Yami Marik.
Para ello, anuncia en televisión la exposición del Antiguo Egipto que se realizará en el Museo Domino, dirigida por Isis. Mokuba ve este anuncio y le dice a su hermano Seto que la exposición parece ser muy interesante. Pero Seto no le muestra mayor interés. Sin embargo, Isis lo invita personalmente a su exposición, tentándole a conocer las cartas que superan el poder de Exodia. Kaiba acepta la invitación con el único fin de conocer esas cartas. Isis le muestra la antigua piedra Rosetta donde está grabada la historia del faraón Atem y el Duelo de Monstruos.
Cuando Seto ve la piedra donde aparece la batalla legendaria del Faraón se percata del gran parecido físico que éste tiene con Yugi y al ver la imagen del rival del Faraón, Isis menciona que este mago es el propio Seto Kaiba. Después de esto, al ver la incredulidad de éste, Isis usa el Collar Milenario para mostrarle parte del pasado.
Seto manifiesta su deseo de saber qué monstruos superan el poder de Exodia, el Prohibido. Tras mostrarle a Seto las figuras de los Dioses Egipcios presentes en la piedra antigua, Isis cuenta que estas cartas fueron robadas por los Cazadores Raros y que para recuperarlas deben llamar la atención de estos sujetos. Así, le propone a Kaiba que él realice un Torneo de Duelo de Monstruos, que será el señuelo para atraer a los Cazadores Raros. Finalmente, ella le da la carta de "Obelisco el Atormentador" a Seto Kaiba.
Ishizu contra Kaiba (SPOILERS)
Más tarde, Ishizu decide participar en el torneo y clasifica para las finales. En las semifinales del Torneo de Ciudad Batallas ella misma busca salvar el alma de su querido hermano Marik Ishtar y para ello busca recuperar el Dios Egipcio que le dio a Seto. Se enfrentaría a él en el último Duelo de las semifinales, en el que se muestra su gran habilidad como Duelista, además de predecir las jugadas de Kaiba con su Collar Milenario. Sin embargo, es derrotada después de que el Cetro Milenario cambiara el futuro que el Collar le mostraba a Isis. Tras su derrota, le entrega su Artículo del Milenio a Yugi Muto, diciendo que ya no le es necesario.
Cuando Odión fue derrotado a manos de Joey Wheeler, el sello que retenía al presunto alter ego maligno de Marik se rompió, liberando así un mal mucho mayor del que ninguno de los presentes había predicho; el temible Marik Ishtar, consejero de la Antigüedad, había despertado para enviarlos no a un simple Juego Oscuro, sino al mismísimo Reino de las Sombras, donde él se había autoproclamado rey.
En el interior de un mundo dominado por la oscuridad y la muerte, el grupo de amigos de Yugi deberán enfrentarse a sus mayores miedos, sus mayores perversiones, sus deseos más retorcidos los tentarán para ser atrapados por el Mal y caer en el mismo encierro que Marik. Tan solo Nederith, que conoce aquel sórdido y terrible lugar como la palma de su mano y es conocedora de las horribles torturas y vejaciones que se sufren allí, será la que pueda sacarlos de Reino de las Sombras y, con suerte, rescatar el alma de Marik y el Consejero de las garras de la Oscuridad.
CONTINUARÁ.